El nuevo arzobispo: un militante antigay

Monseñor Carlos María Franzini, militó activamente contra el matrimonio gay y el aborto. Fuerte polemista contra el Gobierno.

Monseñor Franzini.
No lo dudó. Carlos María Franzini, el nuevo arzobispo de Mendoza en remplazo de José María Arancibia, se paró frente al entonces gobernador de Santa Fe, Hermes Binner y arremetió: tenemos que "rezar para que el matrimonio formado por el varón y la mujer sea cada vez más valorado" porque "está en juego el bien de la Patria cuya célula básica es la familia".

Sucedió en pleno debate por el matrimonio igualitario, una idea surgida del socialismo santafecino, provincia en la que Franzini ejercía el cargo de obispo de la Diócesis de Rafaela.

El obispo militante remarcó que su pedido no obedece a "motivos meramente confesionales" sino porque considera que "está en juego el bien de la Patria, cuya célula básica es la familia, así entendida, vivida y valorada desde siempre".

Frente a él estaban el gobernador y también los legisladores nacionales del Frente para la Victoria que estaban por aprobar la Ley de Matrimonio Igualitario. Les dijo, en tono amenazante:

"Hay que ser fieles al mandato de sus electores y a las propuestas anunciadas en sus programas electorales, ocupándose de los reales problemas de nuestra sociedad, sin traer importados planteos ajenos a nuestra idiosincrasia y a nuestra mejor tradición cultural".


Quedarán atrás las volteretas idiomáticas practicadas por José María Arancibia cuando, decididamente, quería escapar de las afirmaciones comprometidas o contundentes.

A todas luces, el papa Benedicto XVI eligió para Mendoza a un jefe religioso con formación clara, con ganas de hablar y de incidir en la política.

Anti y doctrinario

Franzini es un abierto opositor al Gobierno, a quien acusó en 2005 de estar promoviendo la salida de los católicos de sus prácticas religiosas: “También los políticos se están distanciando de la Iglesia. Néstor Kirchner es el primer presidente que no ha asistido al Congreso Eucarístico Nacional”, dijo en una visita a la sede internacional de la asociación Ayuda a la Iglesia Necesitada (AIN).

Algunas de las frases que configuran una personalidad claramente conservadora del ahora jefe pastoral de la Iglesia Católica en Mendoza son:


“El cristiano se sabe deudor de Dios por el don de su vida, lo reconoce y lo cuida. Pero además se compromete en favor del don de la vida humana en todas sus etapas, desde la concepción hasta la muerte natural y en todas sus dimensiones: física, espiritual, familiar, social, política, religiosa”.



“Algunos que se presentan como católicos y promovieron una legislación en abierta contradicción con nuestra fe en materia de matrimonio y familia; la indiferencia o el rechazo de otros a la insistente enseñanza de la Iglesia sobre la creciente pobreza e inequidad social; o bien, a nivel provincial, un proyecto de ley ingresado hace pocos meses en la legislatura que pretende suprimir los signos religiosos de los espacios públicos por considerarlos ‘ofensivos y discriminatorios’”.


"La institución familiar que está en crisis, la sociedad crispada, la seguridad ciudadana cada día más amenazada, las instituciones de la República vulneradas en sus distintos niveles, el evidente deterioro económico que afecta sobre todo a los más pobres, el medio ambiente que acusa un destrato manifiesto y una creciente pérdida del rumbo en la escala de los valores que nos han dado identidad como pueblo…"

Contra "una Argentina enferma"

Franzini, el 25 de mayo de 2005 lanzó una serie de preguntas que lo terminan por remarcar su personalidad para nada sumisa.

Aquí, las 7 incógnitas del señor arzobispo:

1 ¿Estarán los políticos dispuestos al sacrificio de dar un paso al costado o a revalidar su genuina representatividad por medio de elecciones generales, diáfanas y libres?


2 ¿Estarán los empresarios dispuestos a postergar aún legítimas ganancias para compartir con quienes menos tienen y hace mucho que vienen sufriendo a causa de este sistema injusto?


3 ¿Estarán los dirigentes gremiales dispuestos a no utilizar la representatividad recibida para proteger intereses personales o sectoriales?


4 ¿Estarán los docentes dispuestos a no hacer víctimas directas de sus reclamos, aún aquellos más justificados, a los niños que se les han confiado para que eduquen?


5 ¿Estarán los comunicadores sociales dispuestos a ofrecer un servicio veraz y sobrio, cuyo único objetivo sea transmitir la verdad y favorecer el entendimiento entre todos?


6 ¿Estaremos los líderes religiosos dispuestos a cumplir nuestra misión con sencillez y perseverancia, rechazando la tentación del protagonismo y de ocupar lugares que no nos corresponden?


7 ¿Estarán los simples ciudadanos dispuestos a rechazar la protesta estéril y violenta para convertirla en propuesta constructiva y transformadora?


A todas luces, la designación -que ocurre cuando el gobernador se encuentra de viaje por China- representará todo un nuevo desafío para el gobierno mendocino a la hora de defender en público un modelo que, claramente, está en las antípodas del pensamiento del líder religioso. Pero a la vez representa un aliado del pensamiento con el que se nutre el mismo (y contradictorio) Gobierno: "La opinión de la Iglesia tiene peso en este tema", como han dicho sus voceros a la hora de discutir en torno al aborto no punible.

Leé desde aquí todas las homilías del padre Franzini.

Link permanente: http://www.mdzol.com/nota/432213/

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